Comunicado de Rectoría
Agosto 4 de 2020 ||
Muy buenos días, querida Comunidad Pino Verde.
Hace 25 años, Ricardo, Stellita, Patty y yo emprendimos un sueño maravilloso que hoy se llama Liceo Pino Verde. Durante varios años, me desempeñe como vice-rectora liderando los procesos académicos de la institución, haciendo especial énfasis en el fortalecimiento del inglés con el programa de inmersión, liderando la implementación del Programa del Diploma y la apertura de Track B. De igual manera, desde la vice-rectoría, lideré proyectos de impacto en innovación tecnológica con Claseweb, y más adelante el programa de educación virtual.
Ha sido un camino de gran compromiso, amor por lo que hago, satisfacciones, y crecimiento. También un camino de reconocer que ha habido momentos difíciles inevitables, de los cuales he aprendido a extraer lo más significativo y aleccionador. Desde hace dos años decidí dejar el cargo como vice-rectora para dedicarme a pensar y planificar el futuro de la Educación y crear con la Junta Directiva, nuevos caminos para la institución.
Hoy quiero comunicarles, que me encuentro de nuevo en la operación del colegio, con el inmenso compromiso y amor de asumir la Rectoría de Pino Verde. Sé que son tiempos difíciles, pero la pasión que llevo por dentro y el que Pino Verde sea parte de mi alma, me dará la fuerza y sabiduría necesaria para asumir este liderazgo con mucha responsabilidad.
También esto es lo que me da fuerza:
Me sueño todos los días con las imágenes, experiencias, ilusiones y resultados que viví tantos años en el colegio. Me imagino volver a ver los chiquitos bajarse del bus con sus uniformes impecables, con su maletín gigante y luego volver a verlos en la tarde con el arenero dentro de los zapatos y con la marca del parque en sus camisetas. Me sueño verlos en esos días especiales disfrazados de exploradores, médicos, hadas y duendes.
Me da fuerza, la imagen de los más chiquiticos que llegan con pañal, chupo, cobijita y lágrimas que se secan poco a poco, con el acompañamiento amoroso de las teachers que logran cambiarlas por sonrisas, independencia y por una autonomía tal que ya no se dejan ayudar con su maletín.
Me da fuerza soñar con la creatividad en esos trajes de Pino Verde con 100 maravillosos objetos pegados, que simbolizan las 100 razones que encontró Matías para celebrar el Día 100 de Pino Verde.
Me llena el alma y se me vuelven a encharcar los ojos con el himno nacional cantado por Mariana, con los bambucos cantados por Juanita y escuchar el sonido de la batería de Natalia.
Me llena de fuerza el escuchar tantas historias de éxitos universitarios, profesionales y personales , que nos comparten nuestros ex alumnos cuando visitan el colegio los jueves de frijoles; y en la frijolada recordar con risa, las pilatunas y creatividad en sus respuestas a la hora de los llamados de atención y consecuencias. Con ellos, recordar los amores que nacieron allí en esas aulas, hablar de los matrimonios y de los nietos que ya tenemos en los primeros años.
Me llena el alma, el escuchar nuestros estudiantes del Programa del Diploma en sus debates, presentaciones y propuestas, defender ante el alcalde sus derechos, y leer los títulos de sus monografías, de igual manera ser testigo del liderazgo de los Organizadores del LPVMUN, que no se dejaron de la pandemia y la organizaron de manera virtual.
Son muchas las razones para asumir hoy este cargo, que van más allá de una carrera profesional, son las pasiones del espíritu de educadora que me acompaña cada día de mi vida para poder servir de la mejor manera. Hoy, sé que me encuentro acompañada de un equipo humano maravilloso. Profesores íntegros, profesionales y con alta calidad humana, que cambiaron el chip en dos días dando lo mejor de sí mismos con infinita creatividad y entrega. Hoy sé que están dispuestos y preparados a navegar mejor que nunca estos desafíos que nos trajo la pandemia.
Sé con certeza, que cuento con todos ustedes como familias que hoy más que nunca deben ser coequiperas y protagonistas, y así lo están demostrando en el proceso de formación y educación de sus hijos. Hoy necesitamos fortalecernos como comunidad para cuidarnos, soñar y construir juntos.
Estoy acompañada por un equipo de directoras y coordinadores líderes, que siempre están buscando la mejor manera de seguir llevando la esencia de Pino Verde, la estructura del IB y sus programas, y su propia integralidad y forma de ser en cada acto de sus vidas.
Finalmente, me siento guiada con mucha precisión y pertinencia por los lineamientos, estrategias y sabiduría de una Junta Directiva de titanes en educación. Con la fuerza de todos, con el inmenso legado de Stella Ríos quien se desempeñó en la Rectoría durante 24 años y con los aportes de Gerardo Arroyo en este último año, emprendo feliz este viaje.
Gracias por darme esta hermosa oportunidad.
Diana Ángel
Rectora